Gracias por tu generosidad y tu corazón para dar. Valoramos profundamente cada donativo y nos comprometemos a utilizarlo sabiamente para honrar a Dios y apoyar Su obra.

Los diezmos se destinan directamente a sostener a quienes participan activamente en el ministerio evangélico. Las ofrendas, por su parte, ayudan a cubrir los gastos esenciales de la iglesia, como el alquiler, los suministros y los servicios.

Nos dedicamos a ser transparentes en el uso de estas donaciones y fieles administradores de cada donativo. Gracias por colaborar con nosotros en esta misión.